Me uno a todos los amigos del Rojas para que nuestras voces se hagan oir en defensa de la transparencia y la ética de José Miguel Onaindia, como lo demostrara al frente de su gestión.
Ramón Alfredo Blanco,
Corresponsal del Instituto Literario y Cultural Hispánico
Es mejor la tristeza de una verdad que la alegria de una mentira